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martes, 27 de septiembre de 2011

Compartir la custodia de los hijos es lo raro

en el 86% la custodia es para la madre
Los movimientos reivindicativos no han logrado variar ni un ápice las estadísticas
ELENA AGUILAR 25/09/2011
Entre los innumerables hechos que demuestran el imparable avance de la sociedad hacia la igualdad de sexos hay también excepciones. Y una de las que permanece más enquistada es la relacionada con la custodia de los hijos tras las rupturas matrimoniales. El cuidado de los niños sigue siendo cosa de mujeres y, con el paso de los años, los movimientos reivindicativos o medidas como la ley valenciana de custodia compartida (paralizada por el Tribunal Constitucional desde finales de julio) no han causado el efecto esperado. Al menos, de momento. Las cifras que anualmente publica el Instituto Nacional de Estadística revelan que la custodia compartida sigue siendo una tendencia absolutamente minoritaria en la provincia de Castellón y que en los últimos 3 años, en lugar de ir ganando terreno, ha ido retrocediendo.
El año pasado, solo 56 de las 754 parejas con hijos que firmaron su divorcio en Castellón compartieron la custodia de los menores, lo que representa el 6,23% del total de rupturas con hijos menores de por medio. Ello supone un retroceso respecto a las cifras del 2008. Ese año, los jueces de la provincia otorgaron la custodia compartida en el 7,3% de los divorcios.
Si rara es la opción de la custodia compartida, aún más minoritario es que el juez se decante por el padre. Esto solo ocurrió en 46 ocasiones el año pasado en la provincia, es decir, en el 6% de los divorcios con hijos. En cambio, las madres se quedaron a cargo de los vástagos en el 86% de los casos. En el resto de situaciones, los menores se quedaron con otros familiares directos, fundamentalmente, abuelos y tíos.
Quienes llevan años defendiendo públicamente la custodia compartida de los hijos no pueden disimular su pesimismo. “Tenemos muchas cosas en contra y nos encontramos con decenas de obstáculos”, reconoce Rafael Rodrigo, portavoz de la Federación Valenciana por la Igualdad y la Coparentalidad, que lleva más de una década luchando para que se reconozca el derecho de los padres a estar con los hijos.
Rodrigo asegura que muchos padres divorciados se sienten perseguidos. “Lo único que pedimos es poder estar con nuestros hijos y lo que ocurre en este país no sucede en ningún otro lugar de Europa. Allí el debate sobre la custodia compartida se abrió en 1999 y en 2002 todos los países habían legislado. Aquí llevan 10 años tomándonos el pelo”.
ELENA AGUILAR 25/09/2011

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