CUSTODIA PATERNA: En el nombre del hijo

sábado, 11 de febrero de 2012

En el nombre del hijo

Sábado, 11 de Febrero, 2012

Koldo Meabe lleva 17 días en huelga de hambre para pedir la custodia compartida

Koldo Meabe, en el improvisado campamento frente al Ayuntamiento de Ortuella donde mantiene una huelga de hambre
lA lucha por la custodia compartida ha subido en Euskadi de temperatura a pesar de la gélida climatología. Koldo Meabe ha cogido el testigo de la reivindicación desde hace 17 días en Ortuella y ejerce de padre coraje frente a la legislación con una huelga de hambre a la intemperie. Este progenitor advierte que está dispuesto a llegar al límite para lograr ampliar la convivencia con su hijo de 4 años.
Koldo ha trasladado el frente de batalla junto al Ayuntamiento de la localidad dispuesto a mantener la convivencia con su hijo limitada por lo que considera un régimen de visitas desproporcionado de la custodia única. Este padre toma el aliento de su hijo reforzando su determinación con una encartelada que transmite el deseo de muchos niños que sufren la ruptura familiar: "Aita, no te rindas. Lucha por mí".
Koldo justifica su protesta por su hijo. Este padre dispone de 8 horas semanales de convivencia además de dos fines de semana al mes, un tiempo demasiado corto para los dos. "Las despedidas eran traumáticas y el niño me pedía que hiciera cositas para estar más tiempo juntos", asegura.
"En cada regreso el pequeño se aferra a mi pierna y me ruega más tiempo. Llora y me dice que se va a portar bien. O deja de cenar para alargar el momento porque se quiere quedar a dormir", relata. Las despedidas se llenan de preguntas incómodas sin respuesta posible "Me dice por qué no le dejo quedarse y le digo que las cosas son así".
El desencadenante de su protesta ha sido la percepción de pérdida del hijo. "No quiero esperar, tiene 4 años y está madurando demasiado rápido. No quiero que se le rompa la infancia", señala. Koldo destaca que la reivindicación le ha calmado su espíritu y disipado la ansiedad. "Ahora tengo la conciencia tranquila y he podido dejar las pastillas para dormir. Mi hijo lo es todo para mí", recalca.
El progenitor pasó hace tres días un momento crítico aquejado por un insistente dolor de cabeza que se unía al asedio permanente del frío. Sin embargo, ha remontado su deterioro lo justo para mantener la protesta de manera indefinida. En cualquier caso, el ayuno empieza a llegar a una fase preocupante ante el desgaste físico. "Mi médico de cabecera me ha advertido de que a partir de ahora los órganos pueden empezar a fallar", señalaba ayer. Koldo contrarresta su debilidad, que se manifiesta en la desgana de sus piernas, con el entusiasmo que le transmite el apoyo popular.
Koldo cuenta con el respaldo del alcalde, Oskar Martínez, que ha autorizado el suministro eléctrico de su tienda de campaña. La instalación le permite usar una pequeña estufa contra el frío y transmite su testimonio a través de blogs con la recarga eléctrica del portátil.
Asimismo, para escapar del frío el Consistorio le permite permanecer en las dependencias municipales en horario de oficina. Además, los policías locales se encargan de revisar su estado físico cada mañana. "El alcalde se preocupa por mí y me dice todos los días que vuelva a casa, que el Ayuntamiento me ayudará en todo lo que pueda", señala.
El apoyo popular se manifiesta en múltiples gestos, como las cartas procedentes de toda la Península o las frecuentes visitas en las que se alternan tanto amigos y familiares como desconocidos. "Un vecino despistado incluso me trajo comida", recuerda. Koldo valora especialmente la manifestación de apoyo del pasado domingo en la que participaron todos los partidos a excepción del PSE-EE.
Koldo sigue los pasos de José Lago, el primer padre vasco que sacó a la calle la reivindicación por la custodia compartida. Este progenitor se parapetó las navidades del pasado año en la Gran Vía bilbaína denunciando el supuesto incumplimiento del régimen de visitas y la "manipulación" sometida al menor. Su protesta le permitió recuperar las visitas tras 31 días de una acampada que acabó con su ingreso hospitalario por neumonía.
La custodia compartida ha encallado de momento en el Parlamento Vasco tras la presentación de dos propuestas de ley presentadas a través de la vía de la iniciativa popular. Pese a ello, la demanda ha logrado apoyos destacables, como el respaldo de las Juntas Generales de Bizkaia.